Oído en el tren

--El se quedó con la versión de ella, y ella viste que está copada... y viste que Marcelo y ella, pero bueno, ella lo conoce, ya sabemos. Entonces es como que ahora ya sabe cómo son las cosas. A mí ni me va ni me viene. Yo ya estoy tranquila. Me preguntó, es que tenía esa duda en base a lo normal. ¿Pero quién te contó a vos?
--Lo de Maxi me lo dijo Maxi y lo de Juan supe por Hernán.
--Entonces de buena fuente...

Hablaron boludeces todo el viaje, pero en un tono tan protocolar que parecían cosas importantísimas. Para cuando se bajaron, habían tirado otros datos que las señalaban como abogadas o aspirantes a. Un horror, con la cara de taradas que tenían. Perdón por la agresión, pero es así.

Haz lo que yo digo...

Si las minitas siempre nos quejamos de que ellos no levantan la tapa... ¿Por qué en los baños de mujeres los inodoros están siempre empapados?

Acerca de transparencias

--¿Cómo me queda?
--A ver, date vuelta. Ehmm… bueno, mirá… te queda bárbara la pollera. Pero los hombres cuando vemos una mina que se le ve la bombacha pensamos “ésta quiere que se la metan”. Y a vos se te ve todo el encaje.
Me guardé mis reparos feministas acerca de su observación y me puse un bombachón (ahora les dicen culotte)
Por la calle, un tipo me dijo “¿Para qué te ponés pollera, si se te ve todo? Para eso salí en bombacha, flaca”.
Yo me hice la que no escuché.